Admito que no soy maniática de los cables pero sé que entre los lectores de Decoesfera sois muchos los que os rompéis la cabeza buscando elementos decorativos que no tengan cables o al menos que no sean visibles. Estoy segura de que si este es vuestro caso os encantará la lámpara Morgana de Stefano Papi, que parece que flota bajo el techo.
La fuente de luz también se oculta a la persona que contempla esta lámpara, ya que apenas se aprecia su origen entre las barras metálicas que componen este elemento. Observad cómo además la iluminación se matiza con sombras dramáticas debido a su estructura de un estilo marcadamente industrial.
La verdad es que a mí el concepto de esta lámpara no acaba de convencerme ya que en mi opinión la estancia se oscurece de manera innecesaria, pero he de reconocerle cierto mérito estético. Creo que la vería adecuada en una cocina o en un ambiente en el que predomine el metal, aunque no estoy segura de si la querría en mi casa.
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